Así de simple y el multiverso del mundo interno

Ella y él, frente a frente, cada quien con su arma más letal para aproximarse al cielo de los labios de su contraparte, en el eterno juego de la seducción, pero por dentro de cada una de estas almas, hay un laberinto y miles de caminos por tomar, junto el peligro de quedarse en un mismo sitio. Una ligera estampa de lo que es la obra «Así de Simple», que de simple no tiene nada, porque es sin duda una de las puesta en escena más complejas que se ha visto por estos parajes.

Esta «comedia profunda» creada por las mentes de los argentinos Sofía González Gil e Ignacio Bresso tuvo una gran temporada en la ciudad de Miami, bajo la dirección de Josefina Pieres y bajó el telón el pasado domingo, día de las madres; pero, si se quiere, dejó la puerta entre abierta para un regreso y ojalá así sea, porque vale demasiado la pena que muchas personas la vean, el buen teatro debe ser admirado y la gente debería darle el regalo a sus amigos de moverlos de su rutina a la sala, lo agradecerán.

Los personajes centrales son Joaquín y Clara, un venezolano y una argentina en la ciudad de Miami; una historia por comenzar gracias a una serie de aciertos y desaciertos, los cuales empujaron a la pareja a cruzar el umbral de la puerta de lo incierto y lanzarse de lleno a lo que es el amor. Lo malo, es la literariamente conocida «insoportable levedad del ser», que lleva a estos dos trenes a descarrilarse en su intento de ser simplemente felices.

El meollo de la dinámica de esta obra se va a obviar, se considera que hacer spoilers es una falta de respeto, así que cuando abra una nueva función, les tocará ver la magia que aquí se presenta, una sinfonía perfecta, de movimientos y diálogos.

Josefina Pieres es toda una arquitecta a la hora de construir esta trepidante torre de jenga emocional, donde cualquier movimiento en falso podría echarla abajo hasta sus cimientos. Pero su excepcional trabajo hace que tengamos ante las pupilas visitantes, una auténtica obra de arte.

Mica Plum, se deja la piel en tarima, su personaje que por momentos parece un espectro taciturno, pasa a un frenético toma y dame unidireccional de palabras punzantes. Ella es magia y lo que hace con su arte es sencillamente de otro planeta, una actriz inconmensurable, una artista en todas sus dimensiones.

Saúl Mauricio Mendoza, de diálogos aparentemente furtivos, pero al igual que la teoría del efecto mariposa que indica que el aleteo de una mariposa en Osaka, puede causar todo un cataclismo en otra parte del globo. En este caso el escenario del desastre están en las acciones de Joaquín. Saúl hace este papel a la perfección y muestra que es uno de los talentos más importantes que hay en los Estados Unidos.

Julie Lafuente y tiene un personaje encantador, que toma un poco de su biografía en Instagram, porque tiene un ojo abierto y el otro soñando. A veces un bólido que acelera aún sabiendo que se va a estrellar y otras veces poniendo freno a un impulso que viaja a la velocidad de la luz. Julie en escena es la persona más encantadora de este universo y seguramente de otros a la redonda. Su presencia es adictiva, porque su participación se vuelve entrañable en los corazones de quienes van a ver esta obra.

Ron Chávez, es una de las personas más talentosas del cual se tiene registro, tiene una capacidad de convertirse en lo que sea y a pesar de esto, ha tenido muy poco contacto con personajes bajo parlamento, un mundo opuesto al que habita. Pero en honor a la verdad, arrasa en escena, es un gigante, es un artista nato, que puede lograr mucho en este medio.

Martina Lavignasse es el axis de la historia y su participación fue excepcional, pudo superar un golpe en las costillas en su desempeño en la última función y hacerlo parte de lo que estaba representando, nadie en el teatro se dio cuenta del hecho. Martina sobre las tablas es como un gol en el minuto 91, todo un estasis, que puede poner al filo de la butaca a cada uno de los que presentaron su fragmento de quilópodo de cartón a la entrada del recinto.

Abelardo, es una persona que no tiene espacio determinado en el tablero de juego, puede ser un comediante; un presentador; un adicto a los acentos y en este caso un actor de peso; porque lo que hizo en escena es bastante difícil por toda la complejidad de la puesta en escena. Sin duda lo veremos pronto en grandes carteles, porque tiene la calidad para formar parte de cualquier proyecto, porque es una persona que puede hacer grandes cosas en la actuación.

Entonces, cuando se abra una nueva temporada de esta obra, tienen que ir. Así de simple

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